El Teru Teru Bozu (てるてる坊主) es un muñeco tradicional japonés
empleado, sobre todo por los niños, en los días lluviosos con el fin de que mejore
la situación climatológica atrayendo el buen tiempo, especialmente cuando se
aproximan las vacaciones, un viaje o un acontecimiento importante. La
popularidad de este muñeco se remonta al periodo Edo (también conocido como
Tokugawa 1603 - 1868), cuando al parecer, según cuenta la leyenda, durante una
época de lluvias que amenazaban con arruinar la cosecha de arroz, un monje
prometió a los agricultores detener las aguas y traer el sol de regreso, pero
al no conseguirlo terminó siendo ejecutado. Si tenemos esto en cuenta la
traducción de la palabra puede que no resulte extraña, pues Bozu se refiere a
los antiguos monjes budistas que llevaban la cabeza afeitada, mientras que Teru
Teru es una broma en relación al brillo del sol sobre una testa calva.
En aquel
entonces al fabricarlo había que recitar las siguientes palabras: "sacerdote
del buen tiempo, por favor, deja que mañana haya buen tiempo". Hoy en día
se canta una canción bastante popular:
Teru-teru-bozu,
teru bozu Teru-teru-bozu,
teru bozu
Ashita tenki ni shite o-kure Haz que mañana haga un día soleado
Itsuka no yume no sora no yo ni Como el cielo una vez en mi sueño
Haretara kin no suzu ageyo Si está soleado te daré un cascabel
dorado
Teru-teru-bozu,
teru bozu Teru-teru-bozu, teru bozu
Ashita tenki ni shite o-kure Haz que mañana sea un día soleado
Watashi no negai wo kiita nara Si haces que mi sueño se vuelva realidad
Amai o-sake wo tanto nomasho Nosotros beberemos mucho vino dulce de
arroz
Teru-teru-bozu, teru bozu Teru-teru-bozu, teru bozu
Ashita tenki ni shite o-kure Haz que mañana sea un día soleado
Sore de mo kumotte naitetara Pero si está nublado y tú estás llorando
Sonata no kubi wo chon to kiru zo Entonces, yo te cortaré
la cabeza
Hacerlo es
muy sencillo. Para el cuerpo se puede emplear un trozo de tela blanco o papel
tisú (en mi caso he utilizado un viejo pañuelo). La cabeza se rellena con
algodón, papel de aluminio u otro material al que se le pueda dar forma
esférica. Se decora la cara al gusto de cada uno, ya sea cosiendo, pegando o
dibujando. Finalmente se cuelga con un trozo de cordel o un hilo en la ventana.
Debemos colocarlo con la cabeza hacia arriba si pretendemos ver el sol, pues si
lo dejamos hacia abajo significará deseo de atraer lluvia.
En Japón
se pueden ver en cualquier parte del país, ya sea en la ciudad o en el campo,
pero no es tan fácil encontrarlos, como es obvio, en cualquier estación. En mi
caso los pude ver por primera vez en la villa de Takayama, en los famosos Alpes
Nipones. La verdad es que funcionó a la perfección, pues pese al frío y la
nieve los días que estuvimos allí no sufrimos precipitaciones y nos acompañó el
buen tiempo.
En Alicante es complicado verlo ;)
ResponderEliminarPor allí no os suelen hacer falta, jejeje
EliminarRecuerdo que hasta que estuve en Japón, en el único lugar donde había visto este muñeco era en la F1 cuando existía en equipo de Honda, la verdad que estos japoneses tienen inventos chulos para todo.
ResponderEliminarCreo que por el sur va siendo hora de montar uno de esos, que llevamos un invierno demasiado largo para lo que suele ser por aquí xDDD
Saludotes!
Sí, a todo le intentan buscar solución de la forma más original. Curioso lo de la F1 que comentas, nunca he sido muy aficionado al mundo del motor, pero está bien saber estas cosas, jajaja. Aquí el invierno también se nos está haciendo un poco largo, a ver si empieza a mejorar!!!
EliminarUn saludo!!!